“La Revista ECONLINK acierta cuando constata la volatilidad del entorno por cambios tecnológicos y sociales; es un grave problema real. Acierta también con la dificultad de la estrategia para no caer fuera y la dificultad porque los niveles se van desconectando por las numerosas emergencias diarias, propias de una alta dinámica de cambios estructurales.
Entonces, hay que centrarse en la TACTICA y que abordar la planificación de una manera nueva que se concentre en HITOS, que se van alcanzando en el camino, porque la táctica se ocupa del camino, del cómo, mientras la estrategia se ocupa del objetivo, de la meta, del qué.
En estos tiempo modernos: digitales, ecológicos y colaborativos hay que confiar en la intuición para mantener firme la brújula y escurrir astutamente con planes alternativos que permutan mantener la capacidad de actuar a pesar de estar en una contradicción total, hay que fluir. Esto es PTC, Planificación Táctica Colaborativa“
La Planeación Estratégica es el proceso administrativo mediante el cual se definen los objetivos de largo plazo y las acciones que la empresa debe tomar para el logro de los objetivos. La planificación estratégica pone énfasis en el análisis del entorno, ajustando los planes a los cambios en el entorno.
Los conceptos de estrategia y plan comparten similitudes, pero la clave para entender el concepto de planeación estratégica es tener en cuenta que la planeación estratégica pone énfasis en incertidumbre respecto a lo que ocurrirá en el futuro: las acciones de los competidores y otros cambios en el entorno, etc. De la misma forma que un ajedrecista planifica sus próximos movimientos teniendo en cuenta las jugadas de su oponente, la planeación estratégica ajusta los planes de la empresa teniendo en cuenta las acciones de sus competidores y los cambios tecnológicos, sociales y políticos.
Si analizamos la evolución de los distintos entornos en los que operan la mayor parte de las empresas, vemos que la velocidad y amplitud de los cambios sociales y tecnológicos ha aumentado, mientras que la capacidad de preveer los cambios ha disminuido. Si bien existen empresas que siguen operando dentro de un entorno relativamente estable, como empresas mineras, proveedores del estado o empresas con gran poder de mercado, la volatilidad del entorno en la que operan muchas otras ha aumentado.
No existe una única fórmula de planificación estratégica que se pueda aplicar del mismo modo a todos los tipos de organizaciones y entornos. La planificación estratégica se debe adaptar a cada situación particular. Por ejemplo, si nuestra marca es fuerte y conocida, operamos en un ambiente de poco cambio tecnológico y regulación estable, la planificación estratégica es relativamente simple. Las tendencias suelen mantenerse estables en el tiempo.
Pero si nuestro negocio se basa en tecnología que cambia rápidamente, los cambios pueden ser muy difíciles de predecir. Cuando es tan difícil realizar planes de largo plazo ¿Cómo se realiza la Planeación Estratégica? Los planes deben ser adaptables. La empresa se puede permitir experimentar controlando el riesgo. Desde el punto de vista organizacional, se debe lograr una estructura que permita a la empresa adaptarse rápidamente ante cambios que alteren de manera fundamental el negocio.
Retroalimentación de la Estrategia
La estrategia debe ser actualizada basándose en los efectos de las medidas tomadas anteriormente y en los cambios en el entorno. Una vez puesta en marcha, la estrategia cobra vida y va mutando con el correr del tiempo.
Se deben desarrollar métricas que permitan evaluar la ejecución de la estrategia. Estas métricas sirven:
– Para evaluar la ejecución de la estrategia y tomar medidas correctivas de ser necesario.
– Para que todos los niveles de la organización tengan en cuenta la estrategia a la hora de tomar medidas de corto plazo. Es frecuente que luego de la comunicación de la estrategia, la misma se tenga en cuenta durante varias semanas. Pero con el correr del tiempo, los distintos niveles o sectores van desconectando las tomas de decisiones diarias de la estrategia.
Las métricas ayudan a que la toma de decisiones diaria se mantenga alineada con la estrategia.